Aunque nacido en Puente Genil (Córdoba), tiene fuertes lazos con la comarca, donde cuenta con una peña que lleva su nombre en Los Barrios
Ha fallecido a los 93 años el cantaor andaluz Antonio Fernández Díaz, conocido artísticamente como Fosforito, una de las figuras más señeras del flamenco del siglo XX, dejando atrás un legado artístico imborrable y una vinculación especial con la comarca del Campo de Gibraltar.
Nacido en Puente Genil (Córdoba) el 3 de agosto de 1932, se ha ido para siempre en Málaga. Hace un mes fue objeto de una intervención quirúrgica de corazón y en los últimos días había empeorado por culpa de un proceso infeccioso, de ahí que fuera ingresado este miércoles, falleciendo horas más tarde.
Su carrera comenzó siendo apenas un adolescente y alcanzó la cúspide tras ganar todos los premios del Concurso Nacional de Arte Flamenco de Córdoba en 1956, hito que lo catapultó al reconocimiento como figura del cante profundo.
Aunque su raíz es cordobesa, Fosforito mantuvo una estrecha relación con Andalucía Occidental y, por extensión, con la zona del Campo de Gibraltar. No hay más que ver que en la zona encontramos la Peña Cultural Flamenca Fosforito de Los Barrios, que lleva su nombre desde 1980, actuando como referente de la difusión del flamenco en la comarca.
Su legado artístico incluye una discografía extensa, colaboraciones memorables y el reconocimiento por parte de las más altas instituciones: entre sus galardones destacan la Llave de Oro del Cante (2005), la Medalla de Andalucía (2006) y la Medalla al Mérito en las Bellas Artes (2007).
La muerte del cantaor deja un gran vacío en el mundo del flamenco, donde era considerado «un intelectual del cante», capaz de conjugar innovación y respeto por las raíces. Su figura resonará tanto en Puente Genil como en Málaga y en el Campo de Gibraltar, donde su nombre inspira a nuevas generaciones.




